- En la marca consideran una apuesta demasiado arriesgada el desembolso de un mínimo de 150 millones de euros para vestir al club madridista durante los próximos años
El culebrón por conocer qué marca vestirá al Real Madrid una vez se acabe el contrato que tiene el club blanco con la marca alemana adidas ha escrito un nuevo capítulo. Y esta vez, aunque a muchos les pueda resultar sorprendente, con un final más que esperado.
Under Armour renuncia al Real Madrid
Como ya sucediera en los meses previos al anuncio de la renovación de Nike con el FC Barcelona y mientras se negociaba con diferentes firmas de ropa deportiva la sponsorización técnica del club azulgrana, el nombre de Under Armour también salió al escenario como una de las posibles firmas interesadas en vestir al club catalán. Sin embargo, esta opción fue finalmente desechada por la entidad presidida por Josep María Bartomeu por los enormes riesgos que la misma suponía.
Igual paralelismo ha seguido el rumor-noticia de la posible vinculación de la compañía de Baltimore con el futuro del Real Madrid, una noticia que fue muy comentada a nivel mundial, el del posible interés de la compañía presidida por Kevin Plank pero que, al igual que ocurriera en el caso azulgrana, ha acabado disolviéndose como un azucarillo. Y esta vez a iniciativa de la propia marca.
Una apuesta muy arriesgada
Lo comentábamos hace unas semanas. Mientras todos los medios hablaban del interés de Under Armour en equipar al Real Madrid y de la disponibilidad de la compañía a poner encima de la mesa los 150 millones de euros que como mínimo pide el presidente madridista a la marca que vista a partir del año 2020 al club blanco, desde Marketing Deportivo MD realizábamos el análisis en forma pasiva: ¿Conviene al Real Madrid una firma como Under Armour como sponsor técnico?
Under Armour es una compañía de consolidada presencia en los Estados Unidos pero con mucho camino aún por andar fuera de suelo norteamericano. Y ese es precisamente el gran Talón de Aquiles de la compañía de Baltimore: su escasa presencia a nivel logístico en mercados claves no ya sólo como el europeo sino en otros de mucho y más amplio calado e interés para la entidad madridista como el asiático convertían su intento por vestir al club madridista en un poco más que infructuoso deseo. Tan sólo hay que remitirse a los números. El Real Madrid percibe en la actualidad una cifra cercana a los 40 millones de euros anuales de adidas que se disparan hasta casi el doble como consecuencia de royalties y porcentajes por ventas de los productos de la marca alemana, ventas que tienen su punto fuerte en esos mercados a los que ahora no llega Under Armour.
O dicho de otro modo: el Real Madrid quiere, como ya hemos comentado en Marketing Deportivo MD, una compañía dispuesta a abonar esos 150 millones de euros pero que además cuente con la infraestructura necesaria a nivel mundial como para reportarle al club en concepto de royalties y porcentajes en ventas qué mínimo que lo que en la actualidad aporta adidas para dar un montante global final que rondaría los 200 millones de euros al año.
Pero la apuesta no sólo es arriesgada para el Real Madrid. Under Armour también arriesga y mucho. Ese déficit presencial a nivel internacional provoca que la amortización de esos 150 millones de euros anuales fijos que debería reportar al Real Madrid sea de difícil consecución tal y como está dispuesta la organización de la compañía en el momento actual. Y este mismo motivo es el que ha echado para atrás de manera definitiva los intentos de Under Armour por vestir al club blanco. Una decisión que no pocos ya esperaban dentro del sector.